Me
estoy muriendo
de
esperarte ilusionado
como
un niño
que
aguarda impaciente
frente
a un teatro
a
que comience la vida
que
ya no es de él.
Me
estoy muriendo
sin
morirme,
que
es como el amor
se
desquita
cuando
se le invoca
sin
su permiso.
Me
estoy muriendo
de
ti, de los dos,
es
decir, que estoy atrapado
en
ese vicio
que
era dejar que tú
me
quisieras todo el tiempo.
Me
estoy muriendo
y
a ti y a mí,
ahora
que no hay amor,
nos
tiene sin cuidado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario